Aquel día

Hoy iba caminando por la calle metida en el mundo de su i-pod, atravesando la marea humana de gente que atesta la Gran Vía logroñesa cuando derrepente, algo llama su atención. Es una pareja, que cerca de esos jardincitos alargados que han puesto al lado de la carretera, se mira con intensidad. Él tiene el ceño fruncido, y dice algo que no llega a captar. Ella tiene un semblante triste. Ambos cojen con sus manos la correa de un perro, uno cada uno, que tambien miran cabizbajos al suelo. Un grupo se interpone entre la transeúnte y la pareja. Cuando vuelve a mirar la pareja está abrazada, y acierta a leer en los labios de ella:
-Te quiero.
 Y en ese momento, siente algo dentro, una añoranza tal vez, ni ella misma lo sabe. Y una lágrima desciende ávida por su mejilla. En ese momento, la muchedumbre parece pertenecer a otro mundo, están ellos dos solos, y yo, observando la escena y haciendo indagaciones en la memoria.

Aquel día se me olvidó decirte, que lo vivieras todo intensamente, que rieras a carcajadas, que llorases si tenías ganas, que quisieras, que no tuvieras miedo de sentir, incluso sentimientos desagradables o incorrectos.