Últimamente.

Una está oficialmente fuera.
Otra está a medio camino entre la región del vino y la ciudad capital.
Otras dos B, amenazan con abandonarnos en breves.
Otra es demasiado pequeña para irse todavía, aunque ganas no le faltan.
Y otras dos, se quedan por aquí un año más al menos, afortunadamente para mi.

Hoy me he despertado. 11:48. La persiana estaba bajada, la luz no entraba por la ventana y el pelo me olía a tabaco. A ver cuando lo prohíben en las discotecas. Pub Absolut, pero antes... a si, otra despedida.
A partir de mañana, la mayoría empezamos una nueva etapa, grandiosa, inolvidable, eso dicen. No me apetece escribir una entrada super ñoña diciendo que echaré un montón de cosas de menos, porque ya lo sabéis. Solo decir que volvería a tener 15 años, para repetirlo todo de nuevo, incluso los momentos más tensos.

Últimamente, las amistades no solo viven a dos manzanas.

Ellas